La viralización musical

En esta sociedad global, interconectada y donde parece que el artista debe ser, ante todo, el centro de atención y, en muchos casos se asemeja a una figura donde es el hombre orquesta y, como se puede ver en muchas publicaciones de redes, acaba siendo el jefe de prensa, marketing y otras figuras que no estaban presentes cuando empezó a pensar en crear música. Es, en esta sociedad donde parece que Lo viral es lo que vale.

No es raro encontrar a dos o tres propuestas al año que “despuntan” de la nada. Este año, una de ellas ha sido Iñigo Quintero, para quien no conozca a este artista, ha sido una revolución musical que se a hecho viral a nivel global con uno de sus temas “Si no estas”. Al respecto, todo tiene una perspectiva muy interesante si atendemos a varias declaraciones de su equipo de trabajo, en las mismas queda latente que este hito no ha sido fruto del azar (Ver estos enlaces: Cadena Ser y El Pais).

Imagen creada con una herramienta de Inteligencia Artificial

Al hilo de lo que ha trascendido a medios, no solo se ha potenciado el propio single, se ha creado una pequeña gran estrategia que ha hecho que este tema se posicione como una referencia viral global (incluso en países donde no es el primer idioma). Al margen de lo que podamos pensar, antes de la gran globalización con las redes, no era raro escuchar canciones con otras lenguas en calidad de la canción “del verano”, pero ahora una de las razones por las que se logra es el sistema de “Influencers de plataformas como Tik tok”, algo que está haciendo que el sistema en plataformas cambie (como ya hemos comentado en otras ocasiones).

Lo viral, una fórmula que, en muchos casos tiene truco

Si miramos con detenimiento muchos lanzamientos virales, en primer lugar encontramos una serie de equipos de trabajo (nos referimos a una serie de profesionales en distintos campos que han contribuido con su trabajo y conocimientos aplicados al sector dentro de este lanzamiento) y queda presente que sus aportaciones han sido, cuanto menos acertadas. Fruto de este trabajo encontramos mucha culpa de lo viral. En concreto, nos referimos a cosas tan latentes como el posicionamiento en listas, los influencers, la publicidad y el saber potenciar el buen sabor de una canción hace que sea un gran trabajo.

¿Cómo viralizar una canción?

¿Cómo se puede recrear esto en otros proyectos?, se puede lograr… se puede hacer sin pedir un crédito e hipotecando nuestros bienes. Es por esto que, no hay que creer a todos los que ofrecen servicios, es mejor formarse y confiar en equipos de trabajo para crear esta estrategia (al respecto de este concepto hablamos en el artículo de la dictadura de los viernes https://rockforeveryone.es/la-dictadura-de-los-viernes),  de la misma manera, no hay que obsesionarse.

Actualmente, en la presente industria, las plataformas están buscando que se consiga una serie de usos y en el sistema de listas de Spotify es latente que esto ha hecho que cambien los tiempos y que la demanda de contenido sea mayor… haciendo que en muchos casos sean lanzamientos cada poco tiempo y haciendo que sea viral (a corto plazo) y desparezca (en muchos casos) el valor de la canción.

De la misma manera, hay que reforzar este concepto, debemos reiterar que el trabajo no es síntoma de un éxito seguro, es por esto que hay que formarse y tener la visión de que puede llegar el éxito (cuando crecen los oyentes o salen conciertos) y saber que puede que volvamos al inicio tras los resultados del trabajo (es lo normal ver que un artista pierde escuchas cuando no está de promo y tampoco se puede estar en promoción constante reiterando el mismo concepto dado que esto hace que se pierda mucho alcance y fidelización).

Quiero reiterar en este artículo que lo viral no siempre es síntoma del éxito (las canciones virales deben serlo en todas las plataformas), si un artista quiere tener una buena base, debe conseguir que el crecimiento sea exponencial, haciendo que single a single este crecimiento sea real, así encontrará una fidelización constatable.


Este artículo ha sido redactado por Fujita Pearson.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *