Los hermanos Cavalera siguen con su decisión de traer de nuevo a la vida aquellos primeros álbumes de Sepultura que tanto nos marcaron en su momento. En esta reseña de Schizophrenia podrás descubrir cómo suena el “nuevo” disco de Cavalera, reinventando aquella joya del trash que apareció hace ya treinta y siete años.
Así suena Schizophrenia, el nuevo disco de Cavalera
Analizar un trabajo que es en realidad la regrabación de un disco ya publicado no es una tarea sencilla. Cada vez son más los grupos que se atreven a regrabar sus temas antiguos con nuevos arreglos, una mejor producción o nuevos miembros en su formación. En este caso, los hermanos Max e Igor Cavalera han traído de vuelta Schizophrenia, tercer disco de la banda y primero que grabaron de forma profesional, allá por 1987. En aquel momento, Andreas Kisser acababa de entrar en la formación, y las cosas eran muy distintas en las filas de los brasileños…
Pero no hemos venido a ponernos nostálgicos, o al menos no de esa manera, sino a comprobar cómo los Cavalera le han dado la vuelta al que es, para muchos, uno de sus mejores trabajos bajo el nombre de Sepultura. La introducción al primer tema ha cambiado, pero en cuanto escuchamos el riff de From The Past Comes The Storm nos sentimos automáticamente en territorio reconocible. La evolución en la voz de Max es notable, si lo comparamos con la versión del disco de 1987. El sonido de guitarra se mantiene crudo, cercano al death, pero la batería también ha mejorado bastante en su producción.
To The Wall se mantiene en esa misma senda, con unos riffs apabullantes. La producción en la voz es una referencia directa al disco original, con ese reverb y esa ecualización, que la hace parecer lejana. En cuanto a los riffs y solos, son literalmente idénticos. Los Cavalera no han querido cambiar nada en estas canciones, más allá de la producción y el sonido. La técnica de los hermanos también ha mejorado, eso es indudable, pero es interesante comprobar cómo se han mantenido fieles a los arreglos originales. Escape To The Void o Scream Behind The Shadows muestran la parte más oscura y descarnada de la banda.
Lúgubre y despiadado thrash metal brasileño
Schizophrenia sirvió para poner a Sepultura definitivamente en el mapa con un disco oscuro en el que el death y el thrash se daban la mano. Esta regrabación mantiene esa esencia, potenciándolo con una nueva producción. La instrumental Inquisition Symphony me parece una auténtica locura, un delirio veloz y a la vez elegante con esos teclados tan del gusto del death sinfónico. La velocidad no baja ni un ápice en Septic Schizo, llevando la producción a un nuevo nivel.
El pequeño interludio Abismo nos da paso a Rest In Pain, para mi gusto uno de los mejores temas de aquella primera etapa de los brasileños. La brutalidad de Igor a la batería solo es comparable con la de su hermano Max en las voces. Un cañonazo implacable de thrash que desemboca en la gran sorpresa del disco, Nightmares of Delirium, un tema totalmente nuevo y creado para esta regrabación.
La forma en la que esta canción original encaja con el resto no deja de ser sorprendente. ¿Acaso lo estaban guardando en un cajón desde hace casi cuatro décadas para lanzarlo ahora? Es un puro cañonazo de brutalidad que no tiene nada que envidiar al resto de canciones, y que demuestra, de paso, que Max e Igor siguen más en forma que nunca.
Conclusión de la reseña de Schizophrenia
¿Por qué un grupo regrabaría un disco lanzado 37 años antes? Para que suene mejor, más potente y técnico, elevando el nivel pero manteniendo su esencia. Eso es justo lo que han conseguido Cavalera con Schizophrenia, su nuevo paso adelante en la regrabación de los primeros trabajos de Sepultura. Siendo conscientes de cuál es el fin de los hermanos con estas regrabaciones, no podemos más que disfrutar a lo grande de estos “nuevos” discos.
La producción es impecable, las canciones siguen sonando a las originales, y los cambios más grandes son un acierto total. La nueva portada es mucho mejor que aquella que parecía sacada de… bueno, de un disco de metal underground de los 80, para qué nos vamos a engañar. Y la nueva canción es un broche de oro perfecto para esta regrabación que apunta a convertirse en una de las favoritas por parte de los fans.
Si te ha gustado esta reseña de Schizophrenia puedes echarle un vistazo al debut de Black Hole Paradox con su primer EP, y también a la crónica del concierto de Metallica en Madrid el pasado 14 de julio o el resumen en vídeo de Lèpoka e Ignis Anima en Madrid.