La mítica banda finlandesa Sonata Arctica está de vuelta, y en más de un sentido. Clear Cold Beyond, su nuevo álbum, vio la luz en marzo de este año, y es su primer trabajo tras el quizás no muy inspirado Talviyö de 2022.
Pero, si decimos que los nórdicos están de vuelta en más de un sentido, es porque Clear Cold Beyond no es solo un nuevo trabajo, sino también un claro intento de la banda de volver a sus orígenes más cercanos al power metal.
Así, Sonata Arctica realiza un viaje que puede sonarnos familiar por muchos otros grupos: del sonido de sus comienzos realizan una evolución que gusta más menos a sus fans y que mantienen durante varios álbumes… para finalmente regresar a la casilla de salida.
¿Ha tenido sentido este viaje de ida y vuelta en el caso de Sonata Arctica? ¿Es Clear Cold Beyond el álbum que estábamos esperando? Sigue leyendo y descubre nuestras impresiones sobre el último trabajo de la banda del vocalista Tony Kakko y compañía.
Clear Cold Beyond: ¿el regreso de Sonata Arctica que estábamos esperando?
Clear Cold Beyond, el nuevo álbum de Sonata Arctica que hoy reseñamos en Rockforeveryone, está compuesto por 10 temas, con una duración total de 50 minutos. Son los siguientes:
- First in Line.
- California.
- Shah Mat.
- Dark Empath.
- Cure For Everything.
- A Monster Only You Can’t See.
- Teardrops.
- Angel Defiled.
- The Best Things.
- Clear Cold Beyond.
Desde las primeras notas de «First in Line» ya nos queda claro que este nuevo trabajo es, a la vez, muy viejo. Del metal melódico de sus últimos años, los chicos de Sonata Arctica dan un salto mortal hacia atrás y vuelven al power metal que los hizo grandes (y al que tanto contribuyeron).
La mencionada «First in Line», así como los dos temas que siguen, «California» y Shah Mat» son auténticos trallazos: rápidos, pegadizos y con Tony Kakko luciéndose casi como en los viejos tiempos. Quizás no sean canciones de las que se te quedan en la cabeza durante días, pero son potentes y muy resultonas. Con «Dark Empath» la velocidad comienza a bajar… a ratos, al menos, ya que es un tema complejo y denso que alterna partes a velocidades muy diferentes.
Estos cuatro primeros temas son, para mí, la mejor parte del disco, y en cuanto al estilo, representan bien lo que nos encontraremos más adelante.
A partir de ahí, Clear Cold Beyond baja un punto en cuanto a la inspiración, con la excepción (para mi gusto, al menos) del poderoso y pegadizo «Angel Defiled» y, por supuesto, el tema homónimo del final, en el que es posible volver a encontrar a unos Sonata Arctica en buen forma y, de nuevo, viajar con ellos al pasado.
¿La conclusión? Clear Cold Beyond es una buena muestra de que los Sonata Arctica de siempre aún siguen ahí y, sin duda, es un disco muy decente que ningún fan debería perderse, pero quizás es también relativamente fácil de olvidar.
Su principal pega es que carece de auténticos himnos y que no llega al nivelazo de los clásicos. Por ello, es posible que, una vez escuchado, muchas personas lo dejen en «visto» y, al abrir Spotify o Apple Music al día siguiente y buscar a Sonata Arctica, vuelvan a los álbumes de siempre. El tiempo lo dirá.
Fotos: cuenta oficial de Sonata Arctica en Instagram.