Reseña de Memento Mori de Marduk

Memento Mori de Marduk

En la entrada de hoy, os traemos la reseña de Memento Mori de Marduk, un álbum enérgico y rabioso, pero desgraciadamente poco original y novedoso.

Más de lo mismo

En sus orígenes, Marduk surgió con la intención de ser la banda más blasfema de la escena, algo que en su momento les granjeó numerosas críticas. Una motivación propia de una banda incipiente, compuesta por miembros jóvenes y que (afortunadamente) con el tiempo, acabaron abandonando en pos de una visión más amplia y, podría decirse, más madura. Con el paso del tiempo llegarían a componer lo que, en mi opinión, es su obra maestra: <<Panzer Division>> Marduk. El éxito llegó de nuevo de la mano de la polémica, pues el imaginario en el que se basó el álbum, no fue del agrado de algunos sectores de la población, lo que les ha llevado a sufrir cancelaciones en algunos de sus eventos.

Nos centraremos ahora en el tema que nos ocupa: <<Memento Mori>> de Marduk. Partimos de una idea trillada a más no poder y muy poco original, pero que al menos, está dentro de la estética. He de reconocer que las ilustraciones que acompañan el álbum son de muy buena calidad y están diseñadas con esmero y originalidad. Asimismo, la calidad de la producción y de la grabación es excelente, lo que convierte el proceso de escucha en una experiencia bastante decente, alejada de aquellas grabaciones primigenias del Black Metal.

Musicalmente hablando, Memento Mori tiene todo lo que nos gusta a los aficionados al Black Metal Extremo: riffs rabiosos de guitarra, vertiginosas baterías y decibelios a más no poder. No tiene ningún sentido que nos detengamos a analizar tema por tema, puesto que la «personalidad» de los mismos es casi nula; debe entenderse como un conjunto, una descarga de adrenalina de 40 minutos.

Memento Mori de Marduk. Todos los derechos reservados.
Memento Mori de Marduk

Memento Mori de Marduk: Conclusiones

No es que no me haya gustado, es que no me ha parecido una obra al nivel que corresponde a la banda. Las canciones carecen de personalidad, son muy planas en cuanto a cambios a nivel dinámico y tímbrico y, muy a mi pesar, el desempeño del vocalista (refiriéndome a la originalidad de las líneas, no a la técnica) no está a la altura. 5 años han pasado desde el lanzamiento de <<Viktoria>>, un álbum que continuó y mejoró en algunos aspectos el legado de <<Panzer Division>> de Marduk. Después de tanto tiempo, esperábamos algo más de ingenio en las composiciones.

Es probable que hable desde el corazón, y que los detalles que menciono sean muy sutiles, o incluso exagerados, pero mi deber es contaros lo que he sentido y he analizado. En un mundo donde la oferta musical crece a un ritmo acelerado, entiendo la necesidad de sacar nuevos materiales con regularidad para no caer en el olvido, pero el arte que no se hace con pasión, se nota.

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Acerca de Alejandro Morales Santon

Alejandro Morales Santón nace en Madrid en 1992. Desde muy pequeño demostró interés por la música y durante sus primeros años de vida pasaba gran parte de su tiempo jugando con un pequeño teclado digital. Motivado por un amigo de la escuela, empezó a asistir a clases de música como oyente, preparándose las pruebas de acceso al conservatorio de música Arturo Soria, donde consiguió ser admitido a la edad de 9 años. Allí cursó la especialidad de Oboe hasta completar el Grado Profesional. Motivado por la inquietud y el deseo de involucrarse en el proceso creativo, decidió estudiar el Grado en Composición de Músicas Contemporáneas de la Universidad Rey Juan Carlos, que finalizó en el año 2018. En el año 2022 finalizó los estudios de Post-grado en Gestión de Empresas de la industria musical, con la intención de profesionalizar su trabajo en el ámbito, donde ha trabajado en promotoras de conciertos y como agente artístico. Ha colaborado como compositor de música para cine (Superficies planas, El gato negro) así como en obras teatrales (Amantis), sin dejar de lado sus proyectos personales, tanto en el campo de la composición como en el de la interpretación.

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