El pasado 22 de Septiembre de 2023, vivimos una noche cargada de decibelios en la mítica sala Silicona. En la entrada de hoy os contamos todos los detalles. Esperamos que disfrutéis de la crónica de Aversio Humanitatis, Blazemth e Hipoxia.
Hipoxia
La difícil tarea de abrir el concierto corrió a cargo de los madrileños Hipoxia, con su propuesta de Doom Metal. Tal vez no fue la mejor elección para empezar el concierto, pues costó caldear el ambiente. Hipoxia es un grupo que tiene un sonido contundente, bien trabajado y con una voz profunda y potente, pero por alguna razón, en este evento no tuve la sensación de que conectaran con el público. Un cierre de concierto tan abrupto y repentino como el comienzo. Sea como fuere, sentaron las bases rotundas de lo que estaba por venir, que no era peccata minuta precisamente.
Blazemth
El evento continuó de la mano de los barceloneses Blazemth, que con su Black Metal más clásico consiguieron llevar la sangre de los asistentes al punto de ebullición. Un espectáculo que ellos parecieron disfrutaron y el público también. Guitarras rápidas y confusas, batería machacona y voces demoniacas hicieron las delicias del público, que supo devolver el calor recibido por parte de la banda. En mi humilde opinión, una experiencia divertida y amena que consiguió tender un puente entre los intérpretes y las personas que asistieron al evento.
Aversio Humanitatis
La guinda del pastel la pusieron los también madrileños Aversio Humanitatis. Poco se puede decir del soberbio espectáculo que ofrecieron en este concierto: técnica pulida, sonido contundente, una batería que golpeaba como un martillo neumático… dudo que alguna de las personas que nos encontrábamos en aquel lugar se mantuviera indiferente. Una banda joven que promete va a dar mucho que hablar en la escena si continúan su trayectoria con el mismo nivel y pasión.
Una escena activa es una escena viva
No me cansaré de decirlo: al margen del gusto o la experiencia personal, hay que apoyar la escena emergente. Son muchos los artistas que compaginan su pasión con otras ocupaciones y debemos evitar a toda costa que abandonen la senda por desmotivación o falta de soporte. Es nuestro deber como melómanos cuidar y nutrir una industria alejada de las grandes campañas de publicidad, los grandes eventos y los artistas que repiten la misma fórmula una y otra vez.
Finalizo esta crónica de Aversio Humanitatis, Blazemth e Hipoxia agradeciendo a las tres bandas por el gran espectáculo ofrecido, por su esfuerzo y dedicación y ante todo, por su música. Las fotos que aparecen en este articulo han sido hechas por @henrique_pratas.
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