Pain, la banda, o más bien proyecto personal, del sueco Peter Tägtgren, está de estreno: su último álbum, titulado simplemente I Am (Nuclear Blast), ha visto la luz en mayo de 2024. Precisamente de eso trata este post en el que os traemos la reseña de I Am de Pain.
El estilo musical de Pain, englobado en líneas generales dentro del metal industrial con toques electrónicos, es muy particular. Este hecho, unido al carisma de Tägtgren, hace que un nuevo trabajo de esta banda sea una noticia ciertamente interesante.
Y si a todo esto le añadimos que I Am es el primer trabajo de Pain en 8 años, tenemos uno de esos discos de escucha obligada. Nosotros ya lo hemos hecho y en este artículo vamos a contarte cuáles han sido nuestras impresiones sobre el último trabajo de la banda sueca.
Sobre Pain
Seguramente no habrá muchas personas en el mundo del metal que no conozcan a Peter Tägtgren. El artista sueco, célebre por ser un importante productor musical y el vocalista de la banda de death metal Hypocrisy, creó Pain como un proyecto personal en el que se encarga de todo, literalmente: toca todos los instrumentos para los álbumes, además de las voces, y escribe tanto las letras como la música.
Pain surgió en 1997 y desde entonces han lanzado nueve discos de estudio, contando este último, I Am. Y, como ya decíamos en la introducción, I Am llega tras un parón de 8 años: el álbum anterior, Coming Home, fue lanzado en 2016.
Así es I Am, el último disco de Pain
I Am, el nuevo trabajo de Pain, consta de 11 temas:
- I Just Dropped By (to say goodbye).
- Don’t Wake The Dead.
- Go With The Flow.
- Not For Sale .
- Party In My Head.
- I Am.
- Push The Pusher.
- The New Norm.
- Revolution.
- My Angel.
- Fair Game.
Desde que suenan las primeras notas del primer y potente tema, I Just Dropped By (to say goodbye), podemos ver lo que nos vamos a encontrar, y en ese sentido es un álbum muy honesto: I Am no renueva la fórmula de Pain, pero sí que la refina. Si has escuchado los anteriores trabajos de Tägtgren, sabes lo que te vas a encontrar: más, pero también mejor.
De alguna manera -y aquí muestra su genio- Tätgren se las apaña para combinar en I Am brutalismo industrial, melodías delicadas y un tono que podríamos definir incluso como intimista.
Toda la primera mitad del disco es pura energía, ritmos pegadizos y, en general, caña e intensidad. Dentro de esa homogeneidad, no obstante, surge cierta variedad: tras los dos temas iniciales, muy potentes y puro Pan, llega Go With the Flow con un cierto aire ochentero (personalmente, mi favorita del álbum). Y justo después encontramos Not For Sale, metal industrial pesado con todas las letras.
El intimismo al que nos referíamos líneas arriba llega sobre todo en la parte final del álbum, y en especial en el tema My Angel y el que da cierre al álbum, Fair Game, con un hermoso toque melancólico.
Durante todo el álbum, hay dos sensaciones que dominan. La primera es la que ya decíamos, la rapidez, la energía, el movimiento… I Am es un disco excelente, pero no es lo que querrías ponerte en un día en el que te sientas con falta de calma o tranquilidad (esto no es necesariamente negativo, ojo).
La segunda es que todo está muy pulido, que todos los instrumentos, sintetizadores y pistas vocales encajan a la perfección. Se notan, en definitiva, las tablas que tiene Peter Tägtgren.
Nuestra conclusión sobre I Am
¿Qué podemos añadir? I Am es un álbum que no te va a sorprender demasiado, pero sí que te va a gustar, y sobre todo si ya eras seguidor de Pain.
No innova, pero es que no busca eso y, en realidad no le hace falta: su objetivo es divertir, dar caña, y eso lo hace de forma excelente.
En conclusión, te recomendamos que no te pierdas I Am: el regreso de Pain merece mucho la pena y te dejará pensando en que ojalá no pasen otros 8 años hasta su próximo trabajo.
Fotos: perfil oficial de Pain en Instagram.
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