La excepcional banda de metal sinfónico estadounidense vuelve a la carga con un fantástico disco que hará las delicias de todos los amantes del género. Esta es mi reseña de A Fortress Called Home de Seven Spires.
Sobre la banda
Para los que no les conozcáis, Seven Spires son una banda estadounidense de metal sinfónico fundada en 2013 por la vocalista Adrienne Cowan (colaboradora en los directos de Avantasia desde 2018) y el guitarrista Jack Kosto. A ellos se unirían el bajista Peter de Reyna y el batería Chris Dovas, que abandonó el grupo tras grabar este último disco para unirse a Testament. En estos once años han sacado otros tres discos de estudio y uno en directo, además de haber girado con grandes bandas como DragonForce o Eluveitie y participado en festivales como ProgPower. Musicalmente hablando, abarcan todo el espectro del metal sinfónico, con influencias que van desde bandas accesibles como Nightwish o Kamelot hasta grupos más extremos como Dimmu Borgir y Fleshgod Apocalypse, dándole a su música mucha variedad.
Así suena lo nuevo de Seven Spires
Tras la intro homónima, la encargada de darnos la bienvenida a este trabajo es Songs upon wine-stained tongues, que resume bastante bien la propuesta de la banda: una base powermetalera sinfónica con toques más extremos y otras partes mas tranquilas. Colabora el vocalista Alessandro Conti (Twilight Force, que hace un gran dueto junto al todoterreno vocal que es Adrienne. Le sigue Almosttown, un single muy accesible que por estilo puede recordar a Within Temptation o Nightwish, que además tiene un gran solo de guitarra y uno de los mejores estribillos del disco.
Después de esta llega Impossible tower, un tema más oscuro y lento, con una atmósfera muy opresiva. Love’s souvenir empieza tranquila, como una balada, pero a partir del segundo estribillo estalla con unas baterías atronadoras y Adrienne llegando a notas altísimas. Aparecen también voces operísticas a cargo de Kristin Starskey (Temperance) y Tyler Christian (Lords of the trident). Tras esto llega Architect of Creation, un single con más toques de metal extremo y con otro grandísimo estribillo. Portrait of us es también uno de los singles, más accesible que el anterior y con unas melodías vocales muy interesantes.
La sinfonía continua
Unas gaitas nos dan la bienvenida a la preciosa balada Emerald necklace, en la que la absoluta protagonista es la voz de Adrienne, que da una interpretación de diez. Siguen con Where sorrows bear my name, un medio tiempo oscuro con un estribillo lento y poderoso. No place for us es un tema más melódico y rápido con otro buen solo de guitarra. A continuación llega House of lies, otro tema a medio tiempo con otra gran interpretación de la vocalista. Terminan con otro de los singles, The old pain of being left behind. Es un tema muy power metal, aunque las voces son casi enteramente guturales. Hay una parte más tranquila hacia la mitad de la canción, seguida de dos fantásticos solos de bajo y guitarra, que luego se repetirá a modo de preciosa coda al final.
Conclusión de A Fortress Called Home de Seven Spires
Descubrí a la banda tras ver a Adrienne con Avantasia en la pasada edición del ZLive y en estos dos meses se han convertido en una de mis bandas preferidas. No puedo dejar de recomendarle este disco a cualquiera que disfrute del metal sinfónico, porque estoy seguro de que disfrutará muchísimo este trabajo. Para mi, un serio contendiente a disco del año
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